





















En el año 2019, cámara en mano, hice un viaje por primera vez al puerto de Ilo. Lo recuerdo como si fuera ayer: el sonido del mar, el canto de las aves, la aglomeración de voces en las conversaciones de los pescadores, el inocente juego de los lobos marinos; estaba realmente maravillado con este espectáculo que me estaba regalando la vida. Con mucho cariño comparto estos momentos con ustedes. ¡Espero que disfruten de esta colección!